México jugó contra Japón en un partido amistoso internacional el sábado 6 de septiembre de 2025, realizado en el Oakland-Alameda County Coliseum en Oakland, California. El encuentro inició a las 10:00 p.m. hora del este de Estados Unidos (7:00 p.m. hora del Pacífico). Este partido fue una prueba clave para México en su preparación para la Copa Mundial de la FIFA 2026, que se realizará en territorio norteamericano. Además, representó el primer partido de México tras ganar la Copa Oro 2025, confirmando su dominio en la región de la Concacaf. Por otro lado, Japón también llegó en buena forma, habiendo asegurado su clasificación al Mundial 2026 y presentando un plantel con múltiples jugadores basados en Europa, mostrando un equipo competitivo para este amistoso de alta calidad. El partido terminó en un empate sin goles (0-0), reflejando un duelo táctico, con México mostrando una sólida defensa y Japón manteniendo control de la posesión en distintos momentos.

En cuanto a la alineación, México jugó con un esquema 4-2-3-1 bajo la dirección técnica de Javier Aguirre. Entre los titulares destacaron jugadores como Malagón en portería; en defensa César Montes como capitán, junto a Huescas, Vásquez y Gallardo; el medio campo fue ocupado por Álvarez y Ruíz como contenciones, y Alvarado, Pineda y Vega apoyando al delantero centro Raúl Jiménez, quien tuvo papel protagónico como principal referente ofensivo. Hirving “Chucky” Lozano y Diego Lainez, dos figuras de ataque que estaban regresando tras ausencias, entraron como suplentes. La estrategia de México se enfocó en mantener la organización defensiva y aprovechar oportunidades en ataque, aunque el partido resultó cerrado y con pocas ocasiones claras de gol. Japón, con un sistema más ofensivo 3-4-2-1, alineó a jugadores como Suzuki en el arco, Endo como mediocampista ancla, y delanteros como Minamino y Doan buscando abrir la defensa mexicana. Sin embargo, la defensa mexicana logró contener los ataques japoneses y mantener el marcador sin goles.

Este partido fue significativo para México, no solo por la preparación hacia el Mundial 2026 que se disputará en casa, sino porque demostró la estabilidad que ha ganado el equipo bajo el mando de Javier Aguirre después de una época de crisis. México ha ganado recientemente la Nations League y la Copa Oro, pero aún enfrenta el reto de demostrar su capacidad a nivel mundial, algo que ha sido esquivo en los últimos torneos. Japón, por su parte, es actualmente uno de los equipos asiáticos mejor posicionados en el ranking FIFA, con un estilo de juego basado en el control del balón y una defensa sólida. Este amistoso les permitió a ambos equipos medir su nivel frente a un oponente de calidad, con miras a mejorar y ajustar detalles estratégicos para los torneos futuros. La igualdad sin goles refleja la intensidad y preparación táctica de ambos conjuntos, dejando abierta la expectativa para próximos enfrentamientos.

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